El 7 de octubre celebramos y conmemoramos la proclamación en 1949 de la República Democrática de Alemania en la parte ocupada por las tropas de la Unión Soviética poniendo en vigor la Constitución del nuevo estado socialista por la Cámara Popular Provisional. Desde el principio fue un estado comprometido con el antifascismo, la solidaridad y la lucha por la paz. Mientras en la parte occidental los antiguos nazis fueron rehabilitados y volvieron a sus puestos en la justicia, la educación y hasta en el gobierno de la derecha democristiana, y el anticomunismo y el objetivo de la derrota de la Alemania socialista se convirtieron en razón de estado de la república federal, los y las comunistas de la parte oriental construyeron, junto con la clase obrera, un sistema de salud para todos, un sistema educativo moderno que promovía el potencial de sus estudiantes, viviendas para todo el pueblo y una sociedad solidaria también a nivel internacional. La amistad entre los pueblos y la solidaridad internacional formaban parte integral del sistema educativo de la RDA.

En las Jornadas por la Paz del Partido Comunista de Alemania en agosto de 2024 en Berlín, la RDA fue alabada y conmemorada como el primer estado de la paz en territorio alemán. Un país que contribuía de forma determinante a la paz en Europa. “De qué deberíamos presumir, si no es de la RDA?” (Peter Hacks) fue el lema de la tertulia en que Patrick Köbele, Secretario General del DKP recordó que “apenas 10 años después de la destrucción de la mejor Alemania volvió la guerra a Europa: Yugoslavia no quiso subordinarse al imperialismo y sin la fuerza del socialismo, sin la otra Alemania, la de la paz, la “unificada” pudo intervenir incluso militarmente”.

Durante las jornadas asistió el autor de esas líneas a esta tertulia que, además, contaba con dos artistas de la RDA que hablaron de sus vidas en aquel país pacífico y solidario. La cantante Gina Pietsch nos habló de como su hija pintaba cartas en el colegio para Mikis Theodorakis que luego se le enviaron a la cárcel de la dictadura fascista en Grecia – bolsas y sacos enteros de cartas de solidaridad. Después de su liberación, Theodorakis asistió en varias ocasiones, al “Festival de la Canción Política” en la RDA, y siempre fue recibido con entusiasmo el músico y el combatiente de la resistencia contra el fascismo en Grecia. En el mismo festival tuvo lugar el estreno mundial de su composición del oratorio “Canto Generale” con letras de Pablo Neruda.

El gobierno de la RDA apoyaba a los movimientos de liberación nacional y acogía los refugiados políticos por ejemplo del Chile de Pinochet, palestinos y de otros muchos países.

El profesor Bashar Shamout (Universidad Birzelt, Cisjordania) habla en una larga entrevista con el periódico “Junge Welt” (14 de septiembre 2024) de su estancia como refugiado en la RDA y de la ayuda que prestó el país socialista al nivel cultural del pueblo palestino: “La RDA fue para nosotros uno de los pocos espacios de libertad donde pudimos realizar acciones políticas. Lo que hoy en día es poco conocido, es que fue la ayuda de la RDA lo que permitió a los palestinos desarrollar el sector cultural de forma independiente. Muchos tuvieron la oportunidad de estudiar cine, camera, arte o música en las escuelas y universidades de la RDA. Para hacer películas hacen falta muchos recursos y dinero, la RDA tuvo estas capacidades y nos las prestó. La Palestinian Cinema Institution hizo muchos documentales en colaboración con la RDA. Por todo este apoyo estamos muy agradecidos.”

Al mismo tiempo el gobierno federal – a parte de desacreditar la Alemania socialista sancionando países que pretendían establecer relaciones diplomáticas con la RDA, incluso retirando los embajadores de estos países, por ejemplo Cuba, y obstaculizando la participación de la RDA en eventos internacionales – se dedicaba a buscar aliados contra la amenaza del comunismo y para proteger los valores cristianos y occidentales. Pronto después de la guerra, el gobierno de Adenauer estableció relaciones con la dictadura franquista, primero a través de contactos informales que oportunamente podían recurrir a los alemanes en el territorio del estado español, en su mayoría miembros de las élites nazi que trabajaban ahora para el ejercito y los servicios de inteligencia de Franco o en empresas. La prensa alemana ya en 1948 consideraba a Franco ideológicamente fiable y firme frente a la amenaza de Moscú. A partir de 1950 se intensificaban los intercambios científicos, incluso se apoyó al programa nuclear de Franco, y más tarde, en 1958, abogó el gobierno federal en favor de la integración de España en la Organización de Cooperación Económica y la asociación con la OTAN y la UE (de entonces). Las buenas relaciones entre los reaccionarios alemanes, antiguos nazis y el franquismo facilitó también la colaboración militar. La nueva policía federal fue equipado en 1951 con armas, munición y granadas de producción ibérica y después se desarrolló una estrecha colaboración en la producción de armamento e intercambio de expertos militares. A pesar del acuerdo militar que habían firmado los USA (1958) con el régimen franquista, denunció el New York Times en febrero de 1960 que la Alemania federal estaba planificando junto con el gobierno de Franco una gran base aeronáutica en territorio del estado español.

La propaganda anticomunista tergiversaba y escondía los logros de la sociedad socialista, por eso son completamente desconocidos en la parte occidental de Alemania y Europa – excepto la situación de la mujer. El feminismo occidental sí conocía los derechos de la mujer en la RDA: “Muchas veces deseábamos tener las condiciones de las mujeres en la RDA”, escribió una feminista en su libro (2016) sobre la situación de la mujer en la Alemania socialista. Efectivamente, la igualdad entre hombre y mujer se encuentra ya en la constitución elaborado aún en la zona de ocupación soviética. Las mujeres en la RDA recibieron su propio sueldo lo que les aseguraba la independencia económica. Ellas decidieron si y dónde querían trabajar, desde 1947 rige el principio “igual salario por igual trabajo”. Construían guarderías para que todos los niños a partir de los dos años tuvieran una plaza en ellas y de este modo facilitar la conciliación de la vida familiar y la ejecución de la profesión; numerosas leyes, reglamentos y ordenanzas – seguridad en el trabajo, menos horas semanales, un día al mes para las tareas domésticas, etc. – tenían el fin de conciliar trabajo y familia.

Con la anexión de la parte socialista hubo un retroceso en derechos, muchas mujeres perdieron su trabajo que en la RDA formaba parte de su identidad como mujer emancipada.

La conmemoración el 7 de octubre no es un acto de nostalgia recordando lo que se perdió, es sobre todo la confirmación que hoy en día con el avance del fascismo no hay alternativa: o socialismo o barbarie.

drahreg

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