Pasados más de 100 días desde la heroica acción armada de la Resistencia Palestina, ya no hay la menor duda que lo ocurrido el 7 de Octubre está determinando el futuro de la Humanidad.

De un lado las fuerzas que se alinean con la barbarie imperialista y, de otro, las que se posicionan con el derecho de los pueblos a la Resistencia.  Un enfrentamiento sin vuelta atrás entre quienes defienden los privilegios coloniales y supremacistas de la Entidad sionista y quienes se posicionan con el derecho del pueblo palestino a su Tierra.

Sin opción a posiciones equidistantes, ni a terceras vías fundamentadas en una futura Palestina con dos estados, en este posicionamiento se encuentra el deslinde entre la continuidad de la Barbarie imperialista y la esperanza de un futuro en el que la soberanía e independencia de los pueblos y naciones se respete.

Denunciamos que los EE.UU., la UE, la OTAN y el sionismo internacional, son responsables, de un genocidio de manual contra el pueblo palestino.

Igual que los nazis, pero también como las potencias mercantiles blancas y cristianas de Europa desde el siglo XVI en todo el orbe, o como los yanquis en Vietnam, Camboya y Laos el siglo pasado, el genocidio del pueblo palestino y la destrucción del territorio gazadí se consagra entre los horrores de la Historia de la Humanidad.  Es el imperialismo que, como ha demostrado recientemente en Iraq, Libia, Siria, Sahara, Afganistán, Congo…, siempre actúa criminalmente en defensa de sus intereses y lo hace con el grado de violencia que necesita en cada momento para continuar manteniendo su dominio universal.

El portaviones imperialista en el Mediterráneo Oriental, se lanza por todos y a por todo en defensa de la hegemonía yanqui y la supremacía del dólar, pero enfrente tiene a un pueblo decidido a hacer valer su voluntad de Victoria, que demuestra que con conciencia y organización es posible revertir hasta las condiciones objetivamente más adversas del terreno material y militar. 

Hoy, cuando el Imperialismo está herido de muerte por la propia lógica de su desarrollo y su hegemonía está absolutamente cuestionada por una realidad multipolar que se le enfrenta, la ejecución sin límites de un genocidio sobre Palestina, no solo saca a la luz todas sus contradicciones, sino que expresa la desesperada situación en la que se encuentra y muestra el enorme potencial que tiene la resistencia de los pueblos para golpearle a todos los niveles y, en definitiva, derrotarles.

Gaza defendiendo su existencia y Yemen desarrollando el más coherente ejemplo de solidaridad internacionalista, son un claro ejemplo de lo que afirmamos.

Es una confrontación por la Vida y el derecho a existir que no admite componendas con los verdugos. O vence la Muerte, o triunfan el Eje de la Resistencia y los pueblos que se enfrentan a la dominación imperialista.

La Entidad sionista no tiene ningún derecho a su existencia, ni histórico, ni jurídico, ni legítimo, ni legalmente ético. Se ha configurado como puente de playa del colonialismo en la zona como negación a la milenaria existencia de sus pobladores, con el propósito de la explotación, el pillaje y el control.  Palestina es una del río Jordán al Mediterráneo y necesita todo nuestro apoyo y solidaridad.

Cualquier otra posición que trate de sostener el orden colonial impuesto a Palestina desde 1947 y legitime la existencia de un estado colonial como es la Entidad sionista, es cómplice del genocidio y se sitúa al lado de los criminales que, al mismo tiempo que masacran a la población palestina, asesinan y bombardean en Siria, Líbano, Irán, Iraq y Yemen.

Desde el PCPE, defendemos que el acuerdo en esta posición política, debe ser la base de una amplia unidad antiimperialista que, entre otras cosas, facilite un fecundo diálogo e interactuación entre los partidos comunistas y organizaciones y movimientos antiimperialistas, opuestos al crimen y exterminio del pueblo palestino.

Madrid a 14 de enero de 2024

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