Es un icono del Pop que ha sobrevivido a la Era estelar del pop. Fundó una de las grandes bandas de la música electrónica a nivel internacional: Pink Floyd. Las obras míticas de The Wall o La cara oculta de la luna, así como Whish you were here forman parte de la memoria vivencial de generaciones y generaciones.
Había sido vetado por Bolsonaro en Brasil, su compromiso antiimperialista se caracteriza por una gran firmeza y lealtad a las luchas de los pueblos, la denuncia del carácter guerrerista de la OTAN y de Yankilandia.
Las giras son apoteósicas por los continentes del mundo, sus conciertos se convierten en verdaderas mareas de un público entregado a su música desde México hasta Sudamérica. En la decadente Europa se dio el caso de la maniobra de cancelar el concierto en la pasada primavera en Francfurt por parte de los dueños y accionistas de los derechos de la Messe Francfurt, que dieron instrucciones en el Festhalle el pasado mes de mayo.
Representa una voz imprescindible en la solidaridad con Palestina, continuamente el líder de Pink Floyd denuncia el muro que imponen los sionistas a los palestinos, cientos de kilómetros de cemento en Cisjordania, valla eléctrica en Gaza, así como el muro en la frontera con México o el muro impuesto por la ocupación marroquí en el Sáhara Occidental, privando de su tierra al pueblo saharaui.
Recientemente sus conciertos han sido verdaderos tsunamis como el del pasado 17 de noviembre en Uruguay con su puesta en escena de The bravery of being out of range. El fracaso del lobby israelí ha sido estrepitoso, memorable el escenario donde denuncia a los presidentes yankis desde Reagan a Biden como criminales de guerra. Su voz retumbó también en las entrañas de la Argentina del demente prosionista Milei.
Miguel Ángel Rojas