El magnate Warren Buffett decía “la lucha de clases existe, pero mi clase, la de los ricos, es la que la está haciendo y la estamos ganando”.

¿Y cómo lo hacen? lo hacen a través de una férrea dictadura necesaria para mantener su tasa de ganancia. En el Estado Español lo hacen mediante la connivencia entre el bloque oligárquico burgués, el gobierno socialdemócrata de: PSOE e Izquierda Unida – Podemos, y la ayuda indispensable de los agentes sociales, mal llamados sindicatos.

Cada vez es mayor la explotación y el expolio a la que someten al pueblo trabajador. El Índice de Precios al Consumo (IPC) que representa el valor del coste de la vida, ascendió hasta el 9’8% en el mes de marzo. Si aumenta el precio de los productos o servicios que se consumen, la misma cantidad de dinero será insuficiente para adquirirlos; motivo este de la pérdida de poder adquisitivo, en consecuencia lógica aumentará la pobreza. Teniendo en cuenta que la subida de los salarios, apenas llega al 2%,  semejante inflación equivale a no cobrar un mes entero de un sueldo de doce pagas, bajando de hecho el valor de los salarios reales. 

     

La pérdida de poder adquisitivo a la que los sectores populares se están viendo sometidos es una brutal prueba de la lucha de clases a la que se refería el Magnate: se trata de una potente herramienta que tiene el capital para someter a los trabajadores a la exigencia de extracción de plusvalía

El aumento del endeudamiento y el incremento del coste de vida trae la agudización de la desigualdad (intrínseca al capitalismo), entre clases. En España según el indicador AROPE que mide y clasifica las carencias materiales de las personas en Carencia severa o relativa, sitúa una pobreza global de la población en una tasa del 26,4% en el 2020 (Encuesta de Condiciones de Vida del INE). Y 11 millones de personas viven en riesgo de exclusión social y solo un 42 % de hogares españoles no expresa ningún rasgo indicativo de exclusión. (*Cáritas de 2021). 

La situación de partida del ejército de reserva de parados y el incremento del coste de vida amplía el porcentaje de los hogares que están en riesgo de pobreza y exclusión que aumenta proporcionalmente a la multiplicación de los beneficios de la burguesía. Más de cinco millones de personas han sido atendidas por Cruz Roja a través de su servicio Responde en los últimos dos años, de la nueva crisis económica. Comparándolo con 2020, ha aumentado el número de las personas que acuden por primera vez a Cruz Roja (se sitúa en el 33,8% frente al 21,6% del año anterior).  El perfil de las personas atendidas por Cruz Roja en el 2021 cambia: el 67% de las personas con empleo son trabajadores pobres. Jóvenes, migrantes, familias monoparentales y autónomos. La carencia material severa afecta al 32,1% de los hogares, y un 11,2% tienen a todos los miembros en edad de trabajar desempleados, o con baja carga horaria. Entre quienes tienen empleo, el 67,3% vive en hogares en situación de pobreza, convirtiéndoles en "trabajadores pobres"; y la tasa de pobreza infantil alcanza el 94,1%.

La negación de facto de la lucha de clases que la socialdemocracia hace cuando otorga al sistema capitalista la capacidad de cubrir las necesidades de la mayoría social disfraza la actual situación de crisis capitalista y frena la capacidad de lucha de la clase trabajadora mediante el “pacto social”, sus políticas de conciliación de clases y su compromiso de gestión responsable de la democracia burguesa.

Nuestra obligación es denunciar su juego de entrega, desmaquillarlos para derrotarlos y hacer avanzar nuestras propuestas de emancipación y justicia social.

MY.GO.

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