Hace cuarenta años de un crimen bajo la luna de L´Infinito de Leopardi. Pier Paolo Pasolini fue eliminado de un plumazo. Queda el legado de las películas, manojos de escritos a desempolvar, toda una vida de lucha .
Entendió que los fotogramas y los libros también son armas en la lucha de clases, en la lucha ideológica. La burguesía dispone de un enorme ejército de legitimadores y embaucadores, legiones y legiones enteras a su servicio y disposición. Así borran la conciencia de la explotación para perpetuarla per saecula saeculorum, para desterrarnos y convertirnos en nómadas errabundos a la intemperie, sólo recordar a Totó y Ninetto en “Pajaritos y Pajarracos”.
En esta ocasión tratamos de recuperar la poesía pasoliniana desde “Las Cenizas de Gramsci”, pasando por “La Religión de mi tiempo” hasta llegar a “Transhumanar y Organizar” entre otros .