Los días 10, 11 y 12 mayo, la JCPE fue invitada a participar en el X Congreso de la Unión de Juventudes Saguía al Hamra y Rio de Oro (UJSARIO), en honor al Mártir Ozmán Alí Brahim, en los campamentos de refugiados saharahuis.

En representación de la JCPE asistió el camarada Álvaro Ripoll, miembro de la dirección de la Juventud Comunista de los Pueblos de España. Nuestra asistencia al Congreso de la Juventud Saharaui se enmarca en un momento en el que el Gobierno de España, vulnerando los más elementales principios del derecho internacional, trata de entregar al Pueblo Saharaui a la dictadura del Reino marroquí.

La JCPE, que mantiene estrechas y fraternales relaciones con la Juventud del Frente Polisario, no podía dejar de acudir a la celebración de este Congreso para expresar el apoyo y la solidaridad de nuestra organización, en la lucha por la soberanía y la autodeterminación de ese querido y admirado pueblo.

Recogemos aquí, nuestro saludo al X Congreso de la UJSARIO.

En la Juventud Comunista de los Pueblos de España (JCPE) llevamos varios meses trabajando en la II edición de nuestro Campamento, después de la primera que celebramos en septiembre del año pasado.

En la anterior edición tuvimos la oportunidad de encontrarnos con camaradas de distintos puntos del estado para debatir, aprender, formarnos, y trabajar codo a codo un fin de semana. Fue una experiencia muy enriquecedora, y que sirvió para fortalecer las relaciones fraternales de la juventud militante que desarrolla su actividad en diferentes territorios. El año pasado, nos encontramos y convivimos con camaradas de Cantabria, Murcia, Pais Valencià, Madrid y Andalucía en un precioso pueblo de la sierra madrileña. Los temas de formación que se presentaron tuvieron como eje central el trabajo en frentes de masas y la militancia comunista. Aparte de talleres prácticos de graffiti, aprender sobre fotografía, confección de pancartas y poner en común distintas técnicas de trabajo de agitación. Tuvimos espacio para debatir, aprender, compartir, y crear ocio popular y sano entre las camaradas que allí estábamos. Este último punto es muy importante, ya que quienes asistimos volvimos a casa reafirmando algo que ya sabíamos, que nuestra militancia en la juventud era un acierto y un paso decidido y valiente en nuestras vidas, y que con unas relaciones de camaradería más estrechas se trabaja colectivamente mucho mejor. Empezar el curso político con esta convicción ha sido muy positivo.

Las últimas tasas de paro en la juventud la sitúan en 29,8% (dato INE) en febrero de este mismo año. Las cifras dicen que volvemos a la tasa de paro antes de la pandemia, olvidando que ha sido el empleo juvenil junto con el temporal el más afectado en la pandemia, y dos años de crisis no se solucionan volviendo a la cifra anterior de paro, la cual ha sido la más alta de Europa durante este periodo, y ahora se sitúa entre las tres más altas.

La tasa de paro más alta se da en la franja de edad 16-19 años, que actualmente casi duplica a la siguiente franja más numerosa 20-25 años (datos INE), siendo así la juventud el grupo de edad que más dificultades tenemos para acceder a un empleo, y cuando lo conseguimos es en peores condiciones. La explotación a la juventud tiene sus pilares en las altas tasas de paro y la baja necesidad de cualificación necesaria para sus tareas. Esto, junto a que la juventud, no solemos tener cargas familiares y en ocasiones contamos con el apoyo económico de nuestra familia, coloca el valor de nuestra fuerza de trabajo como mercancía en el mercado a niveles muy bajos, dando como consecuencia unos salarios y condiciones laborales lamentables. La juventud realizamos las tareas de base del sistema productivo (logística, reparto ...) sin las cuales el sistema es difícilmente sostenible.

El conjunto de la juventud pasamos por las mayores tasas de paro mientras intentamos formarnos para no acabar en otra de las mayores tasas de paro llamado de baja cualificación, ya que el acceso a la formación sigue sin estar garantizado.

El pasado 6 de marzo fueron detenidos los hermanos y camaradas Mikhail Kononovich y Aleksander Kononovich, primer secretario de la Unión de la Juventud Comunista Leninista de Ucrania, bajo la acusación de ser espías de Rusia y Bielorrusia. Usando esto como excusa para seguir con su persecución a la movilización comunista y sindicalista. Ante su detención hubo una rápida respuesta por parte de la Federación Mundial de la Juventud Democrática, con comunicados y concentraciones. Seis días después supimos que estaban vivos, pese a que les habían agredido, seguimos exigiendo su puesta en libertad inmediata, sin más agresiones y cargos.

Ésta detención muestra la realidad del gobierno ucraniano, un gobierno fascista que reprime, persigue y busca eliminar las organizaciones comunistas y sindicatos de clase, así como quienes las conforman.

Cuando en el 2013 surgió el movimiento Maidan iniciado como una supuesta respuesta social a la corrupción política, incluso la clase obrera y en concreto minera del Donbass lo veía con simpatía. En ese momento pese a que ellos estaban inmiscuidos en una huelga del carbón en respuesta por el abandono a sus ciudades por parte de la administración. Rápidamente vimos como el Maidan pasó a ser un movimiento de paramilitares con simbología nazi,

La obra de María Sánchez-Saorín competía con otras cien, de autores nacionales e internacionales, en el IV Certamen anual de poesía joven Tino Barriuso. Su libro de poemas- Herederas- se ha hecho con el primer premio.

La editorial Hiperión publicará su obra en los próximos días. Para Unidad y Lucha es un privilegio compartir filas y principios con María Sánchez y el premio  a su poemario es motivo de reconocimiento y orgullo para sus camaradas.

¿Cuándo se despertó el deseo de escribir?

Escribo desde que sé escribir. Recuerdo mi primer cuento, lo escribí con cuatro años. En cuanto aprendí a leer sentí el deseo de crear yo también ficción con las palabras, pero realmente con la poesía no probé hasta los dieciséis años.

¿Qué es lo que te inspira?

La situación de la juventud trabajadora en la educación actual está atravesada por la precariedad: pese a ser un derecho, seguimos teniendo que movilizarnos por este, para que sea pública, gratuita y de calidad. Las consecuencias de que esto no sea así seguimos viviéndolas generación a generación.

La juventud accede a clases no presenciales por distintas razones:

- Estudiar a distancia, para poder compaginarlo con trabajo, o cargas familiares.

- Estudiar de forma presencial, pero no poder asistir a todas las clases por lo mencionado arriba.

- La situación de pandemia y la adaptación de nuestros estudios al modo no presencial.

El curso pasado comenzó con el estudiantado matriculándonos (pagando lo mismo) sin saber cómo iba a ser ese curso, si íbamos a tener que asistir a clase (con lo que suponía en ese momento) ni el formato, ni si tendríamos recursos suficientes para las clases no presenciales. Esta situación la vivimos una juventud que salíamos del confinamiento en el cual nuestros empleos habían sido destruidos, éramos culpadas/os repetidas veces por las distintas olas de COVID para apartar el foco de la gestión de la pandemia, y nos enfrentábamos a la incertidumbre sobre los estudios.

Este 2022 empieza un nuevo año para la juventud que vemos como nuestra situación se agrava día a día ante la crisis actual.

Podemos destacar dos líneas que seguirán marcando el futuro de la juventud. Por un lado, La precarización y el acceso a la vida digna. Por otro, el crecimiento de la extrema derecha y el fascismo.

La precarización y el acceso a la vida digna.

La juventud obrera y estudiante encontramos ahora mismo grandes dificultades para acceder a los derechos básicos, como, por ejemplo, independizarnos con unas condiciones mínimas (ya que el acceso a la vivienda está sujeto a la especulación).

Ante este tipo de problemas en los barrios, desde la JCPE venimos interviniendo desde espacios vecinales organizados contra los desahucios, así como con campañas específicas de problemas que nos afectan, como la denuncia de la presencia de casas de apuestas en los barrios obreros. Mostrando a la juventud que la alternativa pasa por organizarse para luchar.

Conseguir un empleo seguro es un reto; algo imposible de conseguir a través de ETT y subcontratas. Así como, una vez accedemos a un puesto de trabajo, que este nos permita vivir y conciliar con una vida digna.

Cómo ha sido la gestión de este curso escolar por parte de la Universidad de Cantabria.

La pandemia intensificó los problemas y creó nuevos en nuestro sistema educativo.

Tras ya dos años no sirve la excusa de ser algo inesperado.

Ahora queremos centrarnos en cómo ha funcionado la Universidad de Cantabria durante este curso. Es difícil valorar cómo se ha desarrollado el año o qué medidas se han aplicado, ya que se ha actuado de una forma y simultáneamente de la contraria.

Hasta muy recientemente parte de las clases se han dado de manera semipresencial, pero esto no se ha visto reflejado en las tasas, a pesar de una pérdida de calidad al tenerse que hacer online se ha tenido que pagar lo mismo.

En algunas ocasiones las clases online se han realizado sin problema, otras no se sabían usar estas plataformas y en otros casos directamente no se les ha dado la posibilidad a personas confinadas. También el seguimiento de los casos positivos a veces no se ha actuado. Durante algunos momentos cada profesor decidió si hacer presencial o no las clases lo que llevó a no poder coordinar los horarios.

En septiembre de 2022, la Juventud Comunista de las Pueblos de España (JCPE) llevaremos a cabo nuestra II Conferencia de Juventud en Madrid. Hecho que supondrá un paso más en la construcción de la juventud comunista en el estado español.

Así pues, esta conferencia se trata de un avance más en el camino que iniciamos el 13 y 14 de abril de 2019, eso sí, en circunstancias muy distintas. Desde que comenzamos este camino hemos logrado consolidar nuestra organización y hacer avanzar nuestro proyecto, no sin vaivenes. Ahora es momento de reflexionar y hacer un balance de la situación en la que nos encontramos, y para ello lo primero que debemos hacer es aplicar el principio de autocrítica y aprender de los numerosos errores cometidos ya sea fruto de la inexperiencia, la impaciencia o cualquier otro motivo. A la vez, es muy importante inyectar optimismo respecto a los avances realizados estos últimos años, ya que hemos logrado incorporar a jóvenes de gran parte del estado, afianzar colectivos, realizar campañas a nivel estatal, campamentos y estar presentes en diversas luchas alrededor de todo el estado español. Sin duda, durante este tiempo, en definitiva, hemos trabajado para reconstruir un proyecto juvenil cuyo objetivo sea la revolución socialista, un proyecto con la capacidad de poder denominarse Juventud Comunista.

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