La Junta de Andalucía, gobernada por el bipartito PSOE-IU, sobreexplota y despide a un colectivo de más de 800 trabajadores, empleados como monitores, y que desarrollaron funciones de carácter administrativo en colegios e institutos en todo el territorio andaluz.
Estos fueron contratados desde el 2006 a través de ETTs. Estas contrataciones formaban parte de un plan encubierto de privatización de las administraciones públicas.
Estos trabajadores y trabajadoras desarrollan sus labor en condiciones de semiesclavitud.
Perciben un salario de 4 € la hora, el resto se lo embolsa la empresa de trabajo temporal, no se les respeta los mínimos derechos laborales, dándose la situación de que estos no tenían derecho a vacaciones ni a descanso semanal, derecho a convenio ni permisos, ni licencias, ni maternidad, ni lactancia en muchos casos. Obligadas en otros casos a renunciar bajo coacción al finiquito y a la revisión médica legal. Incumpliendo toda la normativa referida a seguridad y salud en el trabajo. Autoformándose para desempeñar su trabajo. La Consejería de Educación, Cultura y Deporte, comienza a despedir a estos compañeros/as en el preciso momento en que gran parte de ellos expresan su malestar por el mantenimiento de sus lamentables condiciones laborales y exigen de la Junta la mejora de éstas. En este período de tiempo la aristocracia sindical que dirigen CSIF, UGT y CC.OO, mientras a estos trabajadores se les somete a tales grados de sobreexplotación, mira para otro lugar.
El PCPE no sólo ha denunciado esta situación: hemos estado apoyando a este colectivo en las manifestaciones que se han convocado y seguiremos trabajando junto a estos trabajadores y trabajadoras, haciéndoles entender que el principal causante de su situación es el capitalismo, que los gobiernos de la burguesía de turno, en este caso PSOE-IU son los ejecutores de las políticas aprobadas en las sedes de las grandes corporaciones financieras. Sólo en el Socialismo-Comunismo podremos conseguir terminar con la explotación del hombre por el hombre.