El pasado 15 de diciembre se confirmó, como era de esperar, el triunfo socialdemócrata en Chile. Bachelet, candidata socialdemócrata apoyada por el PC de Chile, ganó en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales con un 62'16% de los votos.
Con ello se cierra el ciclo de las elecciones burguesas y la traición del PC de Chile a los intereses del pueblo chileno, dando su apoyo al gobierno de izquierdas de la burguesía chilena. Este periódico ya se hizo eco de la noticia sobre la participación de los comunistas en la campaña de Bachelet.
Lo paradigmático de las elecciones burguesas en dicho país es que el verdadero triunfo es el de la abstención que casi roza el 60%, por lo que la socialdemocracia gobernará con apenas un 25% de los votos. Esto es una muestra más de la falsedad de las elecciones burguesas y su nula legitimidad democrática para ejercer la dictadura del capital.