Para quien no lo conozca, les voy presentar el local del Partido Comunista del Pueblo Canario y, cómo no, extender la invitación de visitarlo cuando estén por Las Palmas de Gran Canaria.

Hacia los años 90 se tuvo el acierto político de priorizar la adquisición de un local. Se buscó, consiguió y compró una vivienda en ruinas situada en una zona céntrica de la ciudad, sobre cuyo solar se edificaron dos plantas. Con bastante esfuerzo, aportaciones económicas de militantes y simpatizantes, así como mucho trabajo voluntario, llamado sábados rojos, dio como fruto este valioso patrimonio con el que cuenta el Partido y extensible a los movimientos sociales.

La planta alta dispone de un almacén, sala de reuniones y una extensa biblioteca en cuyas paredes están expuestos varios retratos de grandes hombres y mujeres que lucharon heroicamente por la causa de la clase trabajadora.

En la planta baja es de destacar el amplio salón con una cocina-bar donde se han llevado a cabo actividades como reuniones, charlas, cursos, ciclos de cine, representaciones teatrales, conciertos, grupo de baile, brindis fin de año, etc. Eventos organizados en ocasiones por el Partido, en otras por personas cercanas o colectivos sociales y cuando no, conjuntamente. Un espacio que lleva el  nombre de “Ateneo Popular Jiribilla” en honor a los locales que surgieron del movimiento republicano, y con el añadido de la palabra “Jiribilla”, expresión popular de persona inquieta, en constante movimiento.

Vaya por delante el interés que siempre ha existido en que el lugar sea un espacio de encuentro y participación del movimiento obrero y popular en la isla, un referente para la lucha del pueblo canario de carácter republicano, revolucionario e internacionalista, como así lo reflejan claramente las banderas que ondean la fachada del edificio.

Paqui Sánchez

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