Una vez más los aparatos del estado burgués legislan con intención de favorecer los intereses de la oligarquía, profundizando la brecha económica que sitúa a la clase obrera y capas populares en precariedad y marginalidad. En esta ocasión a cuenta y en detrimento del sistema público de pensiones y para favorecer los fondos privados de pensiones.

El gobierno socialdemócrata del PSOE-UP, al servicio de los intereses del capital oligárquico, ha reunido a la comisión parlamentaria conocida como Pacto de Toledo y ha aprobado una serie de medidas que como objetivo principal tienen el asegurar que la oligarquía financiera, la del estado y la foránea, no vean resentidas sus ganancias y si es posible, que las aumenten engordando sus cuentas de resultados.

Lamentablemente, tanto este gobierno como los anteriores, han contado con la colaboración de organizaciones sindicales que han hecho del "pacto social" y la "conciliación" su argumento principal y que, lejos de representar los intereses de la clase obrera y demás sectores populares, maniatan a quienes dicen representar, trabajadores y trabajadoras y los colocan directamente bajo el yugo del capital.

Todas las medidas que en esta ocasión el gobierno adopta no combaten el interés principal del gran capital de que las pensiones en un futuro cercano estén privatizadas, ni tampoco hace la recomendación de vincularlas a los presupuestos generales, ni sitúa la necesidad de un aumento de las pensiones hasta los 1.084€ que recomienda la carta social europea, sino que suponen abrir la vía a la reforma del Sistema Público de Pensiones, a una total privatización de las mismas. Se continúa y profundiza en la senda privatizadora que los gobiernos del capital, sean del signo que sean, vienen desarrollando desde hace décadas.

Primero fueron por la sanidad pública y la abrieron a las empresas privadas segregando plantillas de limpieza, cocinas, lavanderías, cerrando servicios o centros…o con la Ley 15/97, pero aparentemente nada cambió. También fueron por la educación pública, favoreciendo a la privada y a la concertada y dejando desmantelada y sin medios a la enseñanza pública, tampoco se notaba mucho si no tenías hijas e hijos en primaria o tenías que endeudarte para poder pagar matrículas universitarias. Hasta que en el 2020 con la crisis del coronavirus descubrimos cuan desmantelado está el sistema público sanitario, cuántas vidas humanas se han sacrificado por haber favorecido los intereses y el lucro privado en contra de la salud y la vida de la mayoría social. También descubrimos la brecha que provoca en los hijos y las hijas de la clase obrera la financiación de escuelas privadas y los conciertos educativos de todo tipo. Y ahora…ahora van a dar una enorme dentellada a las pensiones públicas y no debemos consentirlo. No es una tarea de quienes hoy reciben pensiones, al igual que defender servicios públicos no es tarea de quiénes los necesitan. Es una tarea de todas y todos independientemente de la edad o de la situación laboral.

Este gobierno autodenominado como progresista, en ningún momento se plantea la derogación de leyes aprobadas por anteriores gobiernos a pesar de sus promesas electorales, leyes que redujeron o eliminaron derechos fundamentales conquistados al capital por la clase obrera en dura y constante lucha de años por un movimiento obrero organizado.

Desde declaraciones altisonantes se quiere aparentar un cambio en la orientación ideológica del gobierno PSOE-UP, pretendiendo hacernos creer que es progresista cuando la propia existencia del Pacto de Toledo ya muestra las intenciones de legislar a favor del capital.

El pueblo trabajador no debe dejarse engañar con fraseología y cantos de sirena de quienes una u otra vez legislan o favorecen con su ambigüedad o traición que el capital consiga apropiarse de la bolsa de los recursos que son producto de las rentas del trabajo de millones de obreros y obreras.

Desde el PCPE denunciamos que este gobierno, como sus antecesores, todos gestores y defensores de los intereses del capital, legislan y lo seguirán haciendo en contra de los intereses del pueblo trabajador. Un Gobierno que, desde su posición ideológica, que no es sino la de la burguesía y sujeto a los mandatos de su élite, conformada por las grandes empresas, españolas y extranjeras, legisla y legislará mediante reformas y leyes que favorezcan el crecimiento o mantenimiento de su tasa de ganancias.

Ante el ataque despiadado al Sistema Público de Pensiones, secundamos íntegramente la tabla reivindicativa de COESPE por recoger todos los elementos de clase que hoy son necesarios para dar un giro de 180 grados a las políticas reaccionarias y privatizadoras del actual gobierno.

Por ello, trasladamos al conjunto de la clase obrera y capas populares que el derecho a percibir las pensiones, derecho arrebatado a la burguesía a través de una encarnizada lucha, sólo podrá ser mantenido y mejorado si el conjunto del pueblo trabajador se organiza y lucha por sus propios intereses y en contra de los intereses de la burguesía, representada ésta por los partidos institucionales y sus gobiernos.

Sólo una clase obrera organizada e independiente ideológicamente, en torno a la cual se organicen asimismo estudiantado, pequeños comerciantes, trabajadores autónomos y restantes miembros de los sectores populares, podrá llevar a cabo la tarea de derrotar los intereses del capital y sus representantes.

¡Por unas pensiones dignas!

¡Por un sistema público de pensiones para el pueblo trabajador!

Secretaría Movimiento Obrero PCPE.

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