La Confluencia Sindical de la Bahía de Cádiz quiere denunciar enérgicamente la actitud y las palabras del Comité de Empresa de Navantia Puerto Real respecto a la Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM) y del conjunto de trabajadores y trabajadoras de la Industria Auxiliar del Metal de la Bahía.

La presidenta del Comité, Margarita Forné, en una entrevista a la Cadena Ser realiza una serie de acusaciones, además de lanzar inadmisibles insinuaciones, contra un grupo de trabajadores que actualmente están acampados frente a la factoría de Navantia Puerto Real como forma de protesta por haber sido despedidos en clara represalia sindical y que han sido respaldados por sus compañeros y compañeras de la industria auxiliar que masivamente decidieron llevar a cabo un “paro indefinido” de la producción.

Margarita Forné tacha de “actuaciones salvajes” la lucha de unos trabajadores por mejorar unas condiciones laborales que sí son realmente “salvajes”, que ha conllevado decenas de accidentes (algunos mortales, como el de hace dos años) y que precarizan y empobrecen directa e indirectamente a toda la población gaditana. El comité de empresa de una plantilla minoritaria respecto al conjunto de trabajadores y trabajadoras que mayoritariamente conforman el sector de la naval de Puerto Real intenta, nuevamente, criminalizar la lucha y las reivindicaciones de los que deberían estar acogidos a las mismas condiciones laborales y contractuales que disfrutan sus compañeros de plantilla y el propio comité. Un comité que habla con voz de patronal, que aprovecha los medios de comunicación para gastar minutos y páginas en realizar un alarde de autobombo de sus pretendidos “logros” mientras condena y desprestigia a los trabajadores que sufren precarización y represión laboral, amenazas con las famosas “listas negras”, arbitrariedad en las fórmulas y procesos de contratación...

Según la presidenta del comité de Puerto Real, estos trabajadores “engañan a la ciudadanía” y buscan “su propio interés en detrimento del bien general”. De eso, desde luego, debe entender bastante un comité de empresa que ha permitido y continúa permitiendo la destrucción de puestos de trabajo de una empresa pública que ha perdido progresivamente a la inmensa mayoría de su plantilla favoreciendo así las diversas fórmulas de subcontratación y la precarización de todo el sector, que abandona a su suerte al conjunto de trabajadores subcontratados que realizan su labor dentro de sus propias dependencias y que mira para otro lado ante las tremendas injusticias que suceden ante sus ojos.

Esa “ciudadanía” de Cádiz, de la que tan ligeramente habla Margarita Forné, ya no se deja “engañar” tan felizmente como presuponen los comités de empresa de los astilleros gaditanos y ya conoce perfectamente quiénes son los que constantemente lo pretenden. Quizás eso es lo que pone tan nerviosa a la presidenta del Comité de Navantia Puerto Real y le empuja a intentar desacreditar a la Coordinadora de Trabajadores del Metal, que está dando un ejemplo de dignidad luchando por acabar con los despidos arbitrarios, las “listas negras” y los incumplimientos del Convenio del Metal. Por eso quizás también se permite calificar de “masa descontrolada” a los compañeros y compañeras que han decidido “parar” y reivindicar la readmisión de los despedidos y la mejora de las condiciones laborales de los contratados por la industria auxiliar. No es solo “carga de trabajo” lo que se reivindica, señoras y señores de los comités, sino dignidad en el trabajo para todos aquellos y aquellas a los que no protegéis ni amparáis.De una manera verdaderamente “descontrolada” (esta sí), la presidenta insinúa peligrosamente que a los compañeros en lucha “les está saliendo gratis” sus penurias en la acampada a pleno sol. Pareciera que el Comité quisiera alentar a más represalias aún contra los compañeros... sobre todo a la vista del apoyo popular que están recibiendo.

En realidad, hace tiempo que sufrimos la desgracia de actitudes más propias de un comité de “la” empresa. Y que, en ese sentido, utilizan igual que la empresa la precarización y la arbitrariedad en las contrataciones como como armas para reprimir y controlar a la plantilla de la auxiliar.

La Confluencia Sindical de la Bahía de Cádiz denuncia, por tanto, el intento de criminalización de los compañeros de la CTM por parte del Comité, así como las presiones y “advertencias” que están recibiendo por parte de “encargados” de las factorías de Puerto Real y San Fernando los compañeros que están secundando el “paro indefinido”. Asimismo, la Confluencia anuncia a la población gaditana que la pretendida responsabilidad de la “paralización de procesos de selección”, de “pérdidas de contratos” y cualquiera otros “males” supuestamente sobrevenidos al sector naval “por el conflicto” con la industria auxiliar, son meras argucias de la patronal y sus servidores para desmantelar la lucha y así convertir el sector en un cortijo.

Los trabajadores del Metal en lucha nos tendrán siempre a su lado en la brega por conseguir carga de trabajo con dignidad. Y nadie que no tenga un mínimo de conciencia de clase, de la que esta Bahía conoce muchas páginas gloriosas, puede dejar de poner el acento precisamente en eso último: en la dignidad obrera.

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