Estos días está cambiando rápidamente la subjetividad de una buena parte de la clase obrera. Con el ejemplo de las precarias aparadoras de Elda produciendo de forma espontánea y solidaria miles de mascarillas para donarlas sin contraprestación. Con el ejemplo internacionalista que están dando China y Cuba mostrando solidaridad a raudales enviando personal y material sanitario. Con la cuarentena decretada mientras la dictadura del capital obliga a trabajar a muchos y muchas, aún a riesgo de su salud y la de sus seres queridos.

En este contexto, el capital desata una contra-ofensiva ideológica repitiendo machaconamente por todos los medios las supuestas donaciones de Amancio Ortega o vomitando que la ayuda de China se ha conseguido gracias a la mediación del rey. En la lucha de clases, la lucha ideológica es brutal. Nuestro enemigo de clase lo sabe perfectamente, es por ello que silencian la lucha de los trabajadores y trabajadoras que se reproduce en Italia, Francia, Portugal o el Estado español para que se respete su salud. Es por ello que se han puesto manos a la obra para bombardear por todos los medios de comunicación que Amancio Ortega, famoso multimillonario esclavista de niños en Bangladesh, Marruecos o Brasil y evasor de impuestos, ha donado mascarillas cuando la realidad es que esas mascarillas las paga la clase obrera. Es por ello que el capital se ha puesto manos a la obra para lavar la imagen del rey Felipe, bombardeando de forma machacona en todos los medios de agitación y propaganda que la ayuda China ha sido gracias al rey. Una monarquía golpista que, a través de sus lacayos, de forma ruin y miserable retira la herencia de su padre en un momento que la gente no puede salir a las calles. También tenemos los ejemplos de la Unidad Militar de Emergencia y demás cuerpos de represión del Estado a los que se les lava su imagen represiva.

Los millonarios, monarcas y represores tienen mejor campaña de marketing que la clase obrera solidaria. Es tarea de todos los y las comunistas ponerse a la ofensiva en la guerra ideológica en el marco de la lucha de clases. Ahora el viento sopla a nuestro favor, es momento de avanzar decididamente hacia la revolución socialista. El contexto cada día se pone más y más complicado para la clase obrera y todo el conjunto de los sectores populares con cientos de muertos cada día por el Covid-19 y una clase dominante que nos trata como lo que somos en este sistema, una mera mercancía de usar y tirar. La clase dominante demuestra que nuestras vidas, la vida de la clase obrera, no le importa lo más mínimo, motivo por el cual nos hacen trabajar para generar su droga, la plusvalía.

A la ofensiva. Ataquemos todas las contradicciones que se desatan día a día. Demostremos que el socialismo es infinitamente más humano que la más social de las sociedades capitalistas. Está cambiando todo muy rápido, coloquémonos en la vanguardia de esos cambios. Es momento de avanzar en el desarrollo de la conciencia de clase, de la conciencia revolucionaria. Es momento de hacer la guerra ideológica porque está cambiando la subjetividad de la clase obrera, avancemos con determinación de vencer.

MANU

uyl_logo40a.png